Una terminal de combis para recibir 50 mil pasajeros diarios

En el marco de las obras del Metrobús en la avenida 9 de Julio, el Gobierno porteño también avanza con la construcción e una terminal de combis que estará debajo del Obelisco. Con capacidad para 550 vehículos, la playa ya está en su etapa final y la idea es inaugurarla junto a los carriles exclusivos para colectivos. Una vez que esté en funcionamiento, también servirá como un centro de servicios con bar y boleterías. La idea es que las empresas que cargan y descargan pasajeros en la zona del Obelisco lo hagan bajo tierra y, de esta manera, se descomprima el tránsito en ese punto central.

Las obras fueron presentadas ayer por el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, el subsecretario de Transporte, Guillermo Dietrich, y el director General de Transporte, Guillermo Krantzer. En una recorrida, Macri destacó que los objetivos son “brindar a los usuarios de combis mayor confort y seguridad, mejorar la prestación del servicio con una playa que tendrá dársenas para esperar más cómodos, en un lugar techado, con seguridad y en un horario amplio: de 5.30 a 1.30, todos los días”. Según destacó, también habrá una cabecera del SAME con seis lugares de estacionamiento para ambulancias y, en un futuro, la playa también permitirá hacer conexión con las líneas B, C y D de subte a través del nodo Obelisco, ubicado a pocos metros.

Dietrich, por su parte, detalló que la nueva instalación (que está a la altura de 9 de Julio entre Sarmiento y Perón y que hasta ahora funcionaba como estacionamiento subterráneo público) tendrá capacidad para recibir a unos 50 mil pasajeros diarios que usan las combis para ir al Sur y al Oeste del GBA (por ejemplo, a Lomas de Zamora, Adrogué, Ezeiza, Canning, y el corredor oeste: Ramos Mejía, Haedo, Morón y Castelar). En rigor, la terminal tendrá tres carriles de circulación para vehículos, dos dársenas para el ascenso y descenso de pasajeros y accesos peatonales por Sarmiento y Carlos Pellegrini y por Cerrito y Sarmiento, donde habrá un ascensor para discapacitados. Los vehículos entrarán por Sarmiento y Pellegrini y saldrán por Sarmiento y Cerrito.

Con este cambio, las empresas pagarán un canon de 300 mil por año para brindar el servicio, de acuerdo a la cantidad de dársenas que ocupen. En un futuro, la intención es replicar la terminal frente al Correo Central, donde salen combis hacia Quilmes y Berazategui, entre otras localidades.